El término otoplastia describe cualquier tipo de cirugía plástica realizada en el oído externo. Un cirujano puede tratar las orejas para corregir su posición, tamaño o forma. La otoplastia es uno de los procedimientos más comunes en la medicina estética, y se realiza para hacer que las orejas que sobresalen estén más cerca de la cabeza.
Para la realización de este procedimiento, normalmente se recomienda esperar hasta que el cartílago de las orejas se haya estabilizado, lo que suele ocurrir cuando se tiene alrededor de cinco años. Muchos padres aprovechan esta circunstancia para programar la cirugía de orejas u otros tipos de otoplastia cuando su hijo tiene entre cinco y siete años.
Sin embargo, la edad no es el único factor que hay que tener en cuenta para una otoplastia. Por ejemplo, es mejor que el paciente no fume, ya que el tabaquismo aumenta el riesgo de complicaciones y la probabilidad de que queden cicatrices visibles. Se aconseja al paciente que fuma que deje de hacerlo varios meses antes de someterse a la otoplastia para garantizar un procedimiento y una recuperación sin problemas.
También es mejor que el paciente goce de una buena salud general. Las enfermedades cardíacas, los trastornos de la coagulación y los problemas pulmonares aumentan el riesgo de complicaciones durante y después de la cirugía. Los pacientes con estas afecciones pueden necesitar un control adicional o medicación para garantizar un resultado satisfactorio.
Cuando un paciente padece de infecciones de oído, es normal que deba tener que esperar a que la infección desaparezca antes de poder someterse a un procedimiento de otoplastia para corregir el aspecto de sus orejas.
¿Cuál es la edad máxima para someterse a una otoplastia?
Aunque la otoplastia es más frecuente en los niños, los adultos también pueden beneficiarse de esta intervención. Una vez que las orejas han dejado de crecer, no hay restricciones de edad. Muchas personas se someten a una intervención de orejas cuando son jóvenes, otras lo hacen en una edad más avanzada.
La otoplastia es un procedimiento mínimamente invasivo; sin embargo, sigue siendo una cirugía, y debe abordarse de la misma manera que otras formas de cirugía. Uno de los principales inconvenientes de realizar una otoplastia en un niño es que a menudo es una decisión tomada por los padres, y el niño puede no entender por qué se le somete a un procedimiento quirúrgico.
Cuando la otoplastia se realiza en un adulto, se sabe que el paciente entiende todo lo que conlleva una cirugía y elige el procedimiento por sí mismo.
Otoplastia en Canarias
Aunque la edad de 5 años es la más temprana para recomendar la realización de una otoplastia, cada niño y cada situación son únicos. Si te preocupan las orejas prominentes de tu hijo, pero no estás seguro de que esté preparado para una otoplastia, o si quieres cambiar el aspecto de las tuyas, asegúrate de consultar con un médico certificado.
En Clínica ICA en Canarias, nuestro equipo médico puede ayudarte a tomar una decisión que sea la mejor para un pequeño o para ti. Ponte en contacto con nosotros para concertar una consulta en una de nuestras clínicas convenientemente ubicadas en Tenerife y La Palma. Nuestro dedicado equipo de profesionales se complacen en explicar todas las opciones con mayor detalle y responder a cualquier pregunta que puedas tener.
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